jueves, 28 de enero de 2010

LOS JÍBAROS


   Los jíbaros, son un pueblo indio americano, formado por alrededor de 40 tribus, que viven en la región amazónica del este de Ecuador, y en las zonas limítrofes del este de Perú, en los Andes, los valles de los ríos Marañón Santiago y Pastaza superior. 
   
   Ellos se dan a sí mismo el nombre de "shuar". Están divididos en 4 grandes grupos y al parecer constituyen una rama lingüística independiente. Permanecieron totalmente independientes durante siglos, al rechazar con éxito los intentos de los Incas por someterlos durante el periodo prehispánico, y malograr los esfuerzos de los misioneros españoles a lo largo del siglo XVI para colonizarlos y convertirlos al cristianismo.  Hasta muy entrada la era moderna, continuaron resistiéndose a modificar su estilo de vida. 

   Eran expertos guerreros, muy hábiles y astutos. Utilizaban cerbatanas, arcos y flechas, lanzas y escudos durante los combates. 

   Una de sus costumbres y el motivo por el cuál crearon leyenda es que reducían las cabezas de sus enemigos abatidos en combate, porque creían que así, evitaban el retorno de los espíritus vengativos de sus víctimas. Las cabezas quedaban reducidas hasta un tercio de su tamaño real, mediante un proceso consistente en extraer la materia blanda y los huesos, cocer la piel y rellenarla con arena y piedra, para su posterior moldeo y decoración. Este proceso duraba unas 20 horas. Se colgaban las cabezas de sus víctimas como trofeos en sus vestimentas, creyendo que con ello obtenían poderes sobrenaturales y así quedaban protegidos de todo   espíritu maligno. 

   Actualmente, son una población bastante
 culturizada. Viven en casas redondas de madera llamadas "jibarías" hechas de hojas, lianas y troncos. Cada una de estas casas alberga a familias amplias compuestos por unos 40 miembros. 

   Como pueblo agrícola cultivan maíz, tapioca, frijol, plátano y algodón , que además utilizan para fabricarse su propia vestimenta. También se dedican a la crianza de cerdos y llamas. Los hombres se dedican en exclusividad a la caza y la pesca, dejando a las mujeres la realización del resto de actividades. No tiene una política formal y practican la poligamia . 

   

martes, 19 de enero de 2010

KOROWAI




   Los Korowai, también conocidos como los Kolufo, son una curiosa tribu que se esconde en el sureste de Papua, en lo más profundo de la selva. Fué una tribu totalmente desconocida hasta los años 70. Su peculiaridad reside en que es una tribu que práctica el canibalismo, actividad prácticamente desaparecida en la mayor parte de las tribus que aún no se han extingído.


   Se compone de unas 3000 personas, dividiéndose en grupos de 10 ó 12 y habitan en casas construidas en las copas de los árboles en mitad de la selva. Desconocen por completo la existencia de cualquier progreso como pueden ser carreteras, coches o penicilina. 

   Son conocidos por los extranjeros como "laleo", demonios fantasmas, a pesar de que la mayoría de las personas que componen está tribu, jamás ha visto a una persona de raza blanca.


   Suelen pelearse a menudo entre ellos, pudiéndolos calificar, como una tribu conflictiva.
   Practican el canibalismo con todo aquello que consideran que son brujos, que han tomado la forma de un hombre, y que consideran que son responsables de las muertes misteriosas producidas en la tribu. Consideran que los "brujos" atacan a los miembros de su tribu en plena noche, adoptando la forma de algún familiar. Así abren sus cuerpos y les queman el estómago llenándolo de fuego, cuando en realidad ese "fuegos" son los distintos parásitos que ocasionan dolores insoportables provocándoles la muerte. 
  
 En las ocasiones que practican el canibalismo, los Korowai, atrapan a sus víctimas, atándolas y llevándolas río arriba, para allí mientras realizan sus cantos e invocaciones, sacarles las tripas y quitarles los brazos y piernas. 

   Cocinan la carne envuelta en hojas, bajo una pila de piedras calientes, que hacen de horno. Del ser humano se comen todo, excepto los huesos las uñas y el pene. No dejan que los niños participen en esta actividad. Tan sólo comen los hombre y mujeres que estén presentes en el momento del sacrificio. Comentan que la carne humana sabe como un ave procedente de Sudáfrica y que para ellos el manjar de los humanos es el cerebro. 

   Tan sólo un investigador fue capaz de llegar hasta ellos y salir con vida para poder comentar las diversas curiosidades de está tribu. Comenta que estuvo con el jefe de la tribu en su "casa" y que no le transmitió miedo en absoluto. Pero sin embargo, cuando llegó hasta allí uno de los mejores asesinos de la tribu con una cabeza humana entre sus manos, para entregar al jefe, dice, sintió un miedo difícil de explicar. 

   Ya ven, es una tribu cuanto menos curiosa y de la que se conoce muy poca información ya que cualquiera que trate de acercarse hasta su territorio está amenazado de muerte.